Criptomonedas – Soy Minero (III)

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En el presente artículo analizaremos el hardware y el software implicados en los procesos de minado.

La columna vertebral de un proceso de minería exitoso es sin duda el hardware que estás dispuesto a usar. Actualmente, los usuarios tienen una enorme variedad de dispositivos de hardware, todos los cuales ofrecen diferentes ventajas, dependiendo de cómo van a ser utilizados. En los inicios de la era de la minería de criptomonedas, los usuarios eran capaces de minar incluso utilizando sólo su CPU (el procesador). Existen muchos factores que influyen en el proceso minero y en su evolución y uno de ellos es, la ya mencionada anteriormente, ‘dificultad’ minera.

La incremental dificultad del proceso de minado impone la necesidad de usar hardware de minería más potente para calcular las ecuaciones matemáticas requeridas. En última instancia, observamos una revolución de hardware con el reciente uso de las GPU’s (Tarjetas Gráficas). Utilizadas especialmente en los videojuegos para PC’s, las GPU han evolucionado hasta convertirse en una de las opciones de hardware para minería más comunes y rentables del mercado. Puedes utilizar una o varias GPU’s para extraer una criptomoneda en concreto. Cuando se tiene más de una tarjeta gráfica, la configuración se denomina equipo o conjunto de minería, que permite un proceso más eficiente.

A medida que la tecnología se desarrolla, aparecen en el mercado formas más avanzadas de dispositivos de hardware. El más popular entre los nuevos mineros es el revolucionario hardware de minería ASIC, que está construido para extraer de la forma más potente un algoritmo específico. La máquina ASIC es el último desarrollo, que evita el uso de un software de minería, normalmente necesario para los mineros con GPU. Son un poco más caros, en comparación con las tarjetas gráficas, pero mucho más potentes, logrando mejores resultados en la minería.

Existe un nuevo dispositivo actualizado, similar al ASIC, denominado FPGA. Este es un hardware de minería, que es flexible y puede ser programado para cambiar entre algoritmos. ¿Qué significa esto? Si hoy estás minando el algoritmo X11, uno de los algoritmos de minería más potentes y seguros del mundo cripto y todas las monedas que lo soportan, mañana puedes cambiar el algoritmo. Supongamos que ahora quieres minar Bitcoin – puedes cambiar la configuración FPGA y hacer que extraiga el algoritmo Sha-256. De esta manera, si deseas dejar de minar una moneda en particular, la inversión de la máquina de hardware no se desperdicia – simplemente puedes minar otra.

Por supuesto el éxito del minado va mucho más allá de la elección de un buen hardware. Para obtener los mejores resultados además necesitarás considerar un mantenimiento diario para asegurar el mejor rendimiento del hardware utilizado. No se trata tan sólo de una cuestión de configuración… es además mimar tu estructura de minería: recuerda que el polvo es un gran enemigo de toda maquinaría por lo que es preciso limpiarla con frecuencia y mucho cuidado. De manera añadida, el calor y el ruido producido por una estructura de minado es elevado por lo que si esa estructura crece es preciso pensar en un entorno aislado y acondicionado térmicamente. Por lo tanto… el consumo de energía se va a convertir en un actor protagonista de toda estructura potente de minería. Es preciso tener muy presente que si la red eléctrica existente no puede suministrar la potencia que la configuración de hardware va a necesitar, esto podría provocar problemas a la instalación eléctrica derivados de la sobrecarga y en última instancia dañar el dispositivo o dispositivos que se utilicen para el minado.

Por otro lado, como ya mencionamos en el caso de los ASIC o los hardware de minería FPGA no requieren un software de minería específico, pero, en cambio, las GPU’s sí lo necesitan. Por tanto será preciso en este último caso instalar y ejecutar un software que va a colaborar con el minero GPU para administrar el proceso de minería. ¿Existe una elección universal y perfecta?. No, la elección de la mejor aplicación de software va a depender de la GPU y ante todo de los requisitos particulares de la moneda que escojas minar. Y éste es un nuevo universo que precisarás estudiar en profundidad antes de lanzarte a minar…

Llegado este punto, muy probablemente estarás pensando… es extraordinariamente complejo… ¿Existe alguna otra alternativa para minar?. La respuesta es la denominada Cloud Mining (Minería en la Nube) que consiste en alquilar hardware de minería evitando todas las configuraciones técnicas al utilizar un intermediario, un “proveedor de servicios de minería”, que es un especialista con la capacidad y conocimiento adecuados para gestionar todo el proceso de minería por ti. El proveedor de servicios de minería es quien posee el hardware adecuado y además aplica la configuración adecuada e incluso decide cómo proceder de acuerdo con los cambios de capitalización del mercado. El proceso de minado lo realiza el proveedor a través de un centro de procesamiento de datos remoto y compartido, ubicado en la nube. Para minar mediante Cloud Mining es preciso firmar un contrato con el proveedor y pagar unas cuotas. El proveedor se encarga de todo el mantenimiento y las responsabilidades de consumo energético y tú sólo estarás pendiente de tu monedero. Hay varios proveedores de servicios de minería en la nube recomendables, donde las tarifas son extremadamente bajas, no obligan a largos periodos de permanencia o excesivos impuestos de cancelación si deseas dejar de minar. Por supuesto, nuevamente es preciso informarse en profundidad para evitar estafas y posibles sitios de suplantación de identidad.

¿Es mejor minar en solitario o bien en un pool (incluyendo el minado en la nube que en realidad no es mas que alquilar el poder de hash de un proveedor)?

Después de todo lo explicado, habrás comprendido ya, que la minería de criptomonedas es en realidad una competición – ¿Quién va a extraer primero el siguiente bloque? El criterio más importante para poder competir en una carrera es bien conocido, la velocidad pero es preciso entender que cuando se habla de velocidad en la minería está se representa con la tasa de hash, en otras palabras, cuántos hashes se pueden minar por segundo. La minería con un equipo individual es claramente más difícil, porque su tasa de hash no puede compararse con la de un pool de minería a pleno rendimiento. La inversión en hardware y facturas de electricidad son elevadas, por lo que, si deseas unos ingresos estables y frecuentes, te recomendamos encarecidamente que te unas a un pool (fondo). Combinando tu tasa de hash con la de otros mineros puedes obtener una mejor oportunidad de minar un bloque. Por supuesto, vas a dividir la recompensa una vez que encuentres y valides el bloque, pero es mejor que esperar hasta que extraigas la primera recompensa tú solo. Nuevamente es preciso informarse muy bien puesto que los pagos por minería pueden ser realmente importantes y por tanto al elegir un pool o fondo, es preciso tener en cuenta no sólo el sistema de bonificación y las tarifas, sino también la ubicación de sus servidores.

Para decidir si considerás o no rentable para ti el proceso de minería, debes por tanto analizar con detenimiento diversas variables:

• Precio actual de la moneda
• Su tasa de hash actual
• Dificultad actual de la minería
• Costes actuales de electricidad y refrigeración del equipo
• Inversión actual en hardware / Servicio de minería de nubes

Y es preciso añadir un factor fundamental: cada una de esas variables se encuentra totalmente vinculada al concepto ‘actual’ y actual en el mundo cripto quiere decir altamente fluctuante… – bifurcaciones, subidas bruscas de la dificultad, nuevos dispositivos de hardware, subidas y bajadas de capitalización bursátil de cada moneda – todo esto pasa en cuestión de minutos por lo que… toma tu decisión sobre si minar o no con mucha calma y madurez.